Japón, un país frío para vivir

Hace 44 años que no vivía en Japón continuamente, descubrí algo en este invierno. Cuando yo era soltera, afortunadamente yo no tenía la obligación de cocinar los alimentos en casa, mi madre no me pedía trabajo tan duro tampoco en invierno.

Por primera vez en mi vida, en mis dedos de las manos se pusieron “ simoyake” significa que las “quemaduras del congelamiento”. Después de varias semanas, ahora tengo “ akagire” que siginifica “rojo cortado” en mis dedos de las manos. Hay momentos en que no deseo tocar agua, ni si quiera agua caliente, porque mis manos están sintiendo muy fríos y temo sentir peor.

Cuando vivimos en Canada, la temperatura al exterior bajaba a veinte grados centígrados bajo cero (-20°C), el departamento tenia califacción central y nada mas uno pone la temperatura de veinte grados centígrados (20°C) y vivíamos muy comodamente. En México nunca sentí tanto frío.

En Japón, un pais de 4 estaciones muy marcadas, el verano es húmedo y caliente. La primavera y el otoño son tan bellas y agradables, con una temperatura muy cómoda para vivir. Y el invierno no es tan frío. Si embargo, existe un problema en la construcción de las viviendas, es que en Japón llueve mucho y llegan varios tifones y eso es muy importante, aguantar la humedad del veranos significa que tengan mejor ventilacion en los cimientos de las casas, eso hace que el invierno no sea sencillo sellar las casas para protegerse del frío.

Donde vivimos puede bajar hasta tres grados centígrados bajo cero (-3°C) nada mas. Se siente caliente alrededor de la calefacción del aire acondicionado. Normalmente tienen “ kotatsu” y se calienta metiendo la parte de las piernas y pies. Otros aparatos que usan son las estufas de gas y de electricidad. Desgraciadamente, nosotros no tenemos ninguno de los aparatos extras. La verdad estamos más abrigados y ya. Creo que hoy hace mas frío de esta temporada. La temperature de la casa donde estamos está a trece grados centígrados (13°C). Estoy escribiendo mis comentarios y mis dedos están muy fríos.

La esperanza es que ya pronto termina el invierno y llegará la primavera. Recordando a mi madre, agradezco mucho que no me obligó a tocar el agua fría cuando yo era joven.